Valores y principios para la convivencia comunitaria

Partiendo de que la convivencia entre los miembros de las comunidades no es fácil, está la debemos asumir como un proceso permanentemente en construcción, que requiere del interés de capacidad de entendernos y tolerarnos, para construir los lazos de la unidad, solidaridad y hermandad que hemos olvidado; asimismo, es una tarea que requiere del compromiso de la comunidad, la escuela, la familia, los cabildos, los líderes y todas aquellas personas que se relacionan con las comunidades indígenas.

Los valores son parámetros presentes en la vida cotidiana y manifiestos en los comportamientos y opiniones de los individuos; con ellos, se construyen las normas necesarias para vivir en convivencia comunitaria. Los valores, por tanto, son contenidos que pueden ser aprendidos y enseñados en todos los momentos y espacios de la vida, por medio del ejemplo de los padres los maestros y los líderes, los cabildos y demás miembros de la comunidad. Por eso, es tarea de la familia, la escuela, de los líderes y autoridades indígenas, de toda la comunidad en general, hacer de sus miembros personas capaces de obrar con responsabilidad social para que, en el libre desarrollo de su individualidad, ponga sus capacidades al servicio de los demás y de su comunidad.

Los valores comunitarios hacen posible la convivencia social el crecimiento personal y colectivo; por eso, la educación en valores es importante por la necesidades que tenemos los seres humanos de comprometernos con principios éticos que sirvan para orientar nuestras acciones y comprender a los demás; a partir del reconocimiento de la responsabilidad que tengo con mi familia, mi comunidad, mi trabajo, estoy ayudando a forjar un mejor mañana para mí, mis hijos y mi etnia. Los valores se construyen, por tanto, en principios comunitarios, en tanto que son la base y el fundamento, la causa y la raíz, de los parámetros y reglas de la justicia y de la convivencia comunitaria.
Con el buen ejercicio de la convivencia comunitaria, se pretende hacer de la cotidianidad en las comunidades un escenario para la promoción de la persona, de la identidad indígena; es decir, la vivencia y práctica de los valores y principios comunitarios como los siguientes:

El amor
Como ya anotamos, el amor es un elemento clave que da origen y sentido a la familia, a la convivencia familiar; y, en este sentido, es también un elemento indispensable para la estabilidad y armonía en la comunidad, para la convivencia comunitaria.
En la comunidad, el amor es el respeto el aprecio que las personas tienen entre sí, sentimiento e impulso que las lleva a unirse colaborarse mutuamente; y, de esta forma, van tejiendo relaciones para la convivencia comunitaria. Entre las relaciones que establecen los integrantes de las comunidades, como consecuencia del dialogo, va apareciendo el sentimiento del amor, como característica básica de la comunidad.
Por amor, en general, se entiende una tendencia del ser humano hacia lo que le conviene; sin embargo, es indispensable tener en cuenta que, esta tendencia puede tener distintos motivos y estos son, precisamente, los que diferencian el verdadero del falso amor. Si os motivos, por ejemplo son: el interés, el egoísmo, la codicia u otros parecidos, no puede hablarse de verdadero amor. El verdadero amor humano es generoso, desinteresado lo impulsa la sinceridad y deseo de servir, de compartir, de comprometerse sin esperar recompensas. Cuando hay amor verdadero, el dar produce más satisfacción que recibir; llevando, en forma natural, a la solidaridad y esta conduce espontáneamente a la prestación mutua del servicio.

El respeto
El respeto implica aprender a conocerse y a buscar las condiciones para una vida satisfactoria individual y colectiva, se requiere saber interactuar, es decir, encontrar la mejor forma de comunicarse y convivir con los demás
El respeto es: acatamiento, compostura, equilibrio, consideración, dignidad, diferencia, tolerancia, devoción, cortesía, obediencia, seriedad y responsabilidad. Es el respeto a ti mismo, con valoración y auto comprensión individual; es la consideración y acatamiento hacia sí mismo, hacia los demás y hacia el entorno en que vivimos; es la condición esencial del reconocimiento y el respeto por el otro y los demás.
Sabemos que en nuestras comunidades no estamos solos, lo compartimos con los demás indígenas, con las familias, con las plantas, con los animales y con todo lo que nos rodea, por eso es necesario recordar que cada persona, animal o cosa es diferente y merece respeto y cuidado; porque, el respeto no es solo entre nosotros mismos, hombres y mujeres; el respeto es también para con los animales y la naturaleza; la convivencia comunitaria es entre los seres humanos, y de estos con la naturaleza, en la búsqueda de un equilibrio y de un entorno sano, un ambiente agradable y saludable para todos.

Respeto es comprender y entender que el universo no se da por separado, sino que está en permanente interrelación; que si se destruye, nos destruimos y que si deterioramos Cualquier parte integrante de este nos afecta a todos y cada uno de nosotros. Por tanto, respeto, es conservar y cuidar el territorio como espacio de convivencia donde vive la comunidad, donde se vive y recrea la cultura; es respetar a la madre tierra como generadora de vida, porque nos da las selvas con sus plantas medicinales, los arboles con sus frutos, los montes con animales y los ríos con los peces.

La solidaridad
Entendida como el apoyo y respaldo mutuo que nos debemos dar los unos a los otros, tanto a nivel familiar como a nivel interno con la comunidad y con los demás sectores de la sociedad.
Por solidaridad, los integrantes de la comunidad comparten la vida, las alegrías y la tristeza, los éxitos y los fracasos; y se ayudan afectiva y efectivamente, a superar sus necesidades y a solucionar sus problemas. La solidaridad es la reciprocidad y la generosidad del espíritu en la construcción de convivencia comunitaria.
La solidaridad se manifiesta en; dar a saber, recibir, ayudarse mutuamente, fomentar la cooperación, sentir responsabilidad por el crecimiento y bienestar de los demás. Ser solidario conlleva a compartir, conservar la naturaleza y participar.
La solidaridad no es la suma de interese particulares, la solidaridad exige que se piense en los otros y se actué en bien de los demás. Lo importante es que todo el miembro de la comunidad tenga permanentemente una actitud de ayuda hacia los demás. Siendo consciente de que todos pueden aportar algo positivo a los otros y a la comunidad general.

La responsabilidad
Responsabilidad es responder por nuestros actos en la familia, en el trabajo, en la escuela…. y por sus consecuencias; pues, en mis actuaciones debo tener en cuenta mi propio bien, el bien de los demás y de la comunidad en general. Pero, la responsabilidad no es solo responder por mis actos, ante la autoridad; la responsabilidad, significa también, responder ante nuestra conciencia y ante la comunidad.
Todos somos responsable del desarrollo y buen funcionamiento de nuestra comunidad, por lo que debemos darle toda la importancia y seriedad a las actividades que se programen y asumir las funciones que se nos asignen; porque, el hombre no es responsable solo de lo que hace, sino también de lo que deje hacer, especialmente cuando debo hacerlo.

La ética:
Es la integridad y rectitud en la forma de actuar; es el compromiso del ser humano de tener actitudes y comportamientos responsables y trasparentes frente a sí mismo y frente a la comunidad, como persona, como indígena, sea hombre o mujer.
La ética como compromiso del ser humano se debe orientar e impulsar hacia el perfeccionamiento personal, el mejoramiento de la comunidad para el progreso integral.la ética por ser un compromiso humano, es un contrato consigo mismo, de orientarse permanentemente hacia el perfeccionamiento personal y comunitario; es el compromiso que no hace de ser siempre persona y de ser verdaderamente indígena.
Ética es honradez, es garantizar que todas las actuaciones y bienes de las comunidades se deben hacer y administrar con toda honestidad, evitando dudas y desconfianzas. Somos éticos y honrados cuando actuamos con: rectitud, lealtad, honestidad y conciencia, austeridad, justicia, desinterés, trasparencia, sinceridad y verdad, en el espacio familiar, escolar, comunitario, laboral, etc.
La ética, en el cumplimiento de los deberes, e las relaciones interpersonales, en la solución de los conflictos, es el camino que nos llevara al logro de una mejor convivencia comunitaria.

La ética hace posible que el crecimiento personal, que sea la relación de la verdad con la vida y la manifestación de una fortaleza interior sobre la que se fundamenta la autoestima.

La autoestima
Es nuestra manera de percibirnos y como nos perciben, de valorarnos y como nos valoran; es como nos sentimos, como nos ven nuestros padres, familiares y amigos, el maestro la comunidad, etc. Autoestima es la forma como la persona se siente con respeto a sí misma, producto de una sensación de auto respeto, autovaloración, autoafirmación de su identidad;es el sentimiento valorativo de nuestro ser, de nuestra manera de ser, de quienes somos nosotros, del conjunto de rasgos corporales, mentales espirituales que configura nuestra personalidad, nuestra identidad indígena.

La autoestima es, además, aprender a querernos y respetarnos, es algo que se construye oreconstruye por dentro, esto depende del ambiente familiar, comunitario y social en el que estemos. Una persona con un buen concepto de si, una buena autoestima, es aquella que se aprecia por lo que es, es la que acepta sus sentimientos y emociones, que tiene confianza y seguridad en sí misma, es medio para vivir y convivir con los demás con dignidad.

La dignidad
Es aquello que reclama de sí mismo y de los otros, respeto, estimación cuidado y realización; e l hombre está llamado a ser cada vez más persona, está llamado a crecer y aumentar en si sus características como persona, como indígena pero con dignidad.
La dignidad humana debe llevar al hombre y a la mujer a estimar y respetar su propia y la de los demás y procurar condiciones raza, edad, religión, estado salud, partido político, nivel social, económico, educativo etc.
De la dignidad humana, de lo que el hombre es y está llamado a ser, nacen y se originan los derechos humanos que permitan al hombre alcanzar su propia realización. La existencia de derechos humanos no depende de las declaraciones o leyes humanas, la persona lleva consigo unos derechos que les pertenecen a razón de su dignidad. Derechos de naturaleza humana como la vida, son derechos humanos para todos los hombres porque inviolables, nadie los puede negar; son inalienables, porque nadie los puede ceder, ni siquiera renunciar a sus derechos naturales. La dignidad, es el derecho humano, es poder moral de poseer, hacer o exigir algo.

La identidad
El valor de la identidad se reconoce desde la alteridad: tengo derecho como los tienen mis amigos, mis vecinos, gozo de las libertades como el otro, pienso y aspiro como el otro; no estoy solo, hago parte de una familia, de una escuela, de una comunidad, de un territorio con los cuales me identifico y tengo sentido de pertenencia.
El conocer el pasado y el presente no implica también una nueva mirada sobre el hoy que vivimos y presenciamos; una mirada que aplaude la diversidad cultural, la capacidad de resistencia de nuestros pueblos milenarios, que reconoce la diversidad étnica con el debido respeto por la diferencia y tolerancia por el otro, que supone la afirmación o búsqueda de identidad. Dentro de la unidad de los pueblos se construye la diversidad que se ha de respetar; sustentada está en la actitud de permitir al otro, de tolerar y ejercer el diálogo intercultural y social.
La identidad es la base fundamental de nuestra existencia, es el eje central de las luchas y persistencias de nosotros para no dejar ser pueblos indios; la identidad se logra cuando reconocemos las cualidades, los valores, las creencias y costumbres del grupo al que pertenecemos; identificamos lo que deseamos y somos; cuando aceptamos que somos personas que nos debemos a la tierra, que nos vio nacer, a nosotros mismos, a la cultura, a la historia, a la realidad, al hoy.
Identidad es reconocer y valorar nuestra cultura y diferentes formas de comprender la existencia, nuestras riquezas y diversidad; es respetar y conservar nuestras formas de vida, costumbres y creencias de idiomas; es perpetuar la memoria colectiva, la historia.
Entendemos la identidad como la conciencia d un grupo social o étnico de poseer los elementos y características propias que lo hacen percibirse y reconocerse como perteneciente a un grupo o una etnia; es autoafirmarse como indígena pero sentirse, a la vez, como distinto referente a otros grupos.